En el Valle la Estrella, Limón, la historia de la Escuela La Guaria es también la historia de una comunidad que ha sabido cuidar uno de sus bienes comunes más valiosos: la educación.
El texto “Escuela La Guaria: 60 aniversario (1965–2025)”, escrito por Luis Alberto Soto Ramírez, trabajador social del MEP, recupera con sensibilidad y rigor la memoria de esta institución educativa que nació del esfuerzo solidario de familias campesinas, lideradas por figuras como Santos Zeledón.
Más que una conmemoración, el documento es una invitación a pensar el presente desde las huellas del pasado: a reconocer que la escuela no solo enseña, sino que teje comunidad, identidad y esperanza colectiva.
Soto plantea un desafío profundo: actualizar la misión educativa en un contexto marcado por la desigualdad y la exclusión, y reactivar la participación comunal como eje del bienestar educativo.
A través de testimonios, relatos inéditos y reflexiones sobre la educación pública, este texto nos recuerda que la memoria no es nostalgia: es una forma de resistencia y de construcción de futuro. En un país donde los bienes comunes sociales —como la escuela, el agua o la salud— enfrentan riesgos crecientes, recuperar la historia de La Guaria es reafirmar que el derecho a aprender y a convivir dignamente sigue siendo una tarea colectiva.
Desafíos para el futuro: una escuela que piense su comunidad
En su texto, Luis Alberto Soto no se limita a conmemorar; propone una agenda de transformación. Señala que, tras seis décadas de historia, la Escuela La Guaria enfrenta retos que van más allá de la infraestructura o los recursos materiales. El desafío principal consiste en reconstruir la comunidad educativa como sujeto colectivo, capaz de imaginar y construir la educación que necesita el Valle la Estrella en las próximas décadas.
Entre los puntos que destaca el autor están:
Modernizar la oferta educativa con un enfoque integral, que incluya arte, deporte y pedagogías lúdicas que fortalezcan el aprendizaje significativo.
Combatir la exclusión y la marginación social, especialmente en contextos rurales y costeros que han sido históricamente relegados.
Reactivar el protagonismo comunal, recuperando experiencias organizativas que ya han contribuido al bienestar, como la lucha por el agua potable.
Promover el bienestar integral —físico, mental, social y económico— como condición indispensable para el éxito educativo.
Estos desafíos, más que un diagnóstico, son un llamado a la acción: a recuperar la memoria como herramienta para repensar el presente y fortalecer la educación pública como bien común, enraizada en la vida, la dignidad y el desarrollo de las comunidades.
Puede descargar el documento aquí : Escuela La Guaria: 60 aniversario (1965–2025)
Autor: Luis Alberto Soto Ramírez









