El Observatorio de Bienes Comunes con el apoyo de la Sede del Caribe de la UCR hemos llevado a cabo tres talleres del diagnóstico participativo (2, 16 y 17 de setiembre), en los cuales han participado diversas persones provenientes de organizaciones e instituciones públicas que llevan a cabo sus actividades y procesos en el Cantón, tales como Acueductos y Alcantarillados, DINADECO, Ministerio de Educación Pública, Universidad de Costa Rica, y de organizaciones hemos tenido la fortuna de contar con la Asociación Limonense de Arte, Raíz y Cultura, el Grupo de Guías y Scouts de Valle de la Estrella, la Junta de Salud del Valle de la Estrella y Limon Grow.
En estos tres talleres hemos abordado algunas de las inquietudes principales con las cuales nos motivaba el desarrollo de este diagnóstico. ¿Qué está pasando con los bienes naturales, sociales y culturales del cantón de Limón? y ¿Qué estamos haciendo ante ese contexto?
También, hemos conversado y problematizado la situación de la participación de las personas en el Cantón, dado que en muchas ocasiones se ha caracterizado por el desinterés o la apatía.
Sin embargo:
– no necesariamente la presencia del bien y el reconocimiento de su importancia es garantía de que se encuentre protegido y acompañado.
– las condiciones y garantías actuales de las instituciones públicas presentes en el cantón, enfrentan procesos de debilitamiento para sus funciones de cuido de los bienes sociales, culturales y naturales, lo cual hace tomar mayor importancia la presencia de los procesos organizativos locales para su defensa.
El cantón de Limón cuenta con un sinnúmero de bienes culturales, sociales y naturales, que rodean los diversos espacios y territorios que conforman el cantón.
- Tenemos algunos escenarios que debemos considerar:
Hay procesos que procuran ningunear a las personas líderes y lideresas de las comunidades, calificándolas de personas necias o incómodas.
Ha habido una erosión de la identidad comunitaria.
Existe un escenario de despolitización y erosión de la institucionalidad, provocando recortes de presupuesto y sobrecarga de funciones a las personas trabajadoras.
Por los tiempos y compromisos en los que estamos inmersos, se ha privilegiado la organización de eventos puntuales, sin embargo estos no han logrado generar procesos de participación de mediano y largo plazo, generando poco vínculo y participación.
Muchos de los bienes naturales, sociales y culturales que acompañamos están expuestos a contextos de mercantilización, lo que genera que ciertos sectores de poder, interrumpan o impidan el involucramiento de las comunidades.
Hemos dejado un poco de lado los espacios lúdicos y de creatividad, como puntos de partida para la participación e involucramiento de las personas.
Algunas propuestas que hemos identificado
-Promover procesos de participación que fortalezcan las dimensiones vivenciales de los procesos desde las experiencias de las personas y con una perspectiva de democratización.
-A lo interno de nuestras organizaciones construir procesos de formación que permitan fortalecer el compromiso de las personas participantes y de las comunidades involucradas en nuestras actividades.
-La reivindicación de los espacios lúdicos y festivos como momentos pedagógicos para la participación activa de las personas.
Les queremos compartir los dos primeros boletines, dónde podrán encontrar estas y otras reflexiones que hemos venido desarrollando durante este proceso.